No dejes que nadie te quite tu dominio, ¡protégelo!
En la era digital actual, tener presencia en Internet es esencial. Ya seas autónomo, una pequeña empresa o una gran corporación, tener un sitio web o un blog es imprescindible. Y para ello, es necesario disponer de un nombre de dominio.
Un nombre de dominio es la dirección de tu sitio web, como puede ser cdmon.com. Es la dirección que la gente utilizará para encontrar tu sitio web. Es una dirección única, clave para tu contenido y parte de tu identidad de marca online.
Por ese motivo, es importante asegurarse de que tu nombre de dominio es seguro y está protegido para que no se lo apropie otra persona.
Es un nombre único que identifica un recurso en línea, como un sitio web. Es la dirección que la gente usa para acceder a tu sitio web, y es el nombre que identifica tu sitio web ante el mundo. Una URL consta de varias partes, pero las fundamentales son el nombre de dominio y la extensión.
Tener un nombre de dominio es el primer paso para establecer una presencia online. Pero no basta con registrarlo: también hay que asegurarse de que es seguro y está protegido para que no se lo apropie nadie.
A medida que avanza la tecnología, también los cibercriminales han actualizado sus métodos, por lo que la seguridad de tu dominio resulta vital.
Si no proteges tu nombre de dominio, este puede ser vulnerable a toda una serie de amenazas. Si tu dominio caduca y no lo renuevas, este podría ser registrado por otra persona, lo que podría provocar la pérdida de clientes, ingresos y reputación. También podría llegar a ser usado para lanzar sitios web maliciosos o incluso ataques de phishing.
Si tu web cae, esto podría suponer una pérdida de ingresos para ti y tus clientes, lo que también podría dañar tu reputación. Si tus clientes piensan que no pueden confiar en tu página web o que sus datos pueden estar en riesgo, es difícil que vuelvan a entrar en tu página.
Así que si te preguntabas si la protección de dominios es importante, solo debes mirar las dificultades que un dominio inseguro te puede traer.
Si tienes una página web, la seguridad debería ser una prioridad. La mejor manera de proteger su nombre de dominio es tomar medidas para protegerlo.
Vamos a repasar las mejores prácticas para proteger tu dominio en tres niveles diferentes: en la cuenta del cliente, del propio dominio y en los DNS.
Protección en la cuenta de cliente
Para poder disponer de un dominio, deberás darte de alta en un registrador como puede ser por ejemplo cdmon. Así que el primer nivel de seguridad debe encontrarse en el acceso al Panel de Control desde el que puedes gestionarlo.
El primer paso sería trabajar con contraseñas seguras. Al fin y al cabo, el acceso a tu Panel de Control permitiría a cualquiera que consiguiera tus datos acceso total a tus dominios, por lo que es importante seguir los consejos de seguridad habituales: utilizar contraseñas únicas para cada servicio, utilizar contraseñas seguras y modificar regularmente estas contraseñas.
Una vez se disponga de una contraseña segura, es considerable activar el servicio de autenticación de 2 factores (2FA). Este tipo de validación requiere dos métodos de identificación para poder acceder a un sitio.
En el caso de cdmon, una vez introducido tus datos de acceso, sería necesario también incluir un código desde tu teléfono móvil para validar que realmente eres tú quien intenta acceder y así bloquear el acceso a un atacante, incluso si este se ha hecho con tus datos de acceso.
Protección a del propio dominio
El primer paso es activar la privacidad WHOIS. El WHOIS es una base de datos pública que contiene información sobre nombres de dominio como el nombre del propietario, la fecha de registro o la fecha de caducidad.
Aunque gracias al RGPD europeo muchos de estos datos ya se encuentran actualmente ocultos, el registry detrás de cada extensión decide qué datos pueden ser visibles, por lo que puedes solicitar a través de tu Panel de Control ocultar estos datos para que no sean visibles a nadie. Se trata de un servicio que ocultará tu información de la base de datos pública.
Otra opción interesante es el bloqueo de dominios, un sistema por el que tu dominio no podrá ser transferido de manera ilícita a otro proveedor.
Dejar caducar tu dominio por un despiste puede resultar en otra persona comprando tu dominio y usándolo para perjudicar tu marca o incluso como una página maliciosa. Esto es especialmente cierto en los dominios .es que, una vez caducados, son eliminados y vuelven a estar a la venta 10 días después de su caducidad. Por ese motivo, es importante activar servicios de renovación automática para evitar la pérdida de un dominio.
Si tienes una marca registrada, una manera de proteger tu marca es contratar los dominios con otras extensiones para que no puedan ser utilizados para hacerse pasar por ti. Uno de los ejemplos más relevantes de estos son los dominios .xxx, los cuales suelen ser comprados por grandes empresas para evitar que alguien puedas emplearlos para dañar su reputación.
Protección en los DNS
Cuando navegas por Internet, lo que haces es introducir un dominio en tu navegador, el cual gracias a los DNS identifica la dirección IP del servidor que aloja tu página web.
Otra forma de proteger su nombre de dominio es activar Extensiones de Seguridad DNS (DNSSEC). Se trata de un protocolo que autentica esta resolución de direcciones IP que hacen los DNS al introducir un dominio en tu navegador. Al intentar navegar a una página web, DNSSEC añade firmas criptográficas a tus datos DNS lo cual confirma la autenticidad de la página que quieres visitas.
Tu nombre de dominio es un activo valioso y es importante que te asegures de que está protegido. Tomar medidas para protegerlo es la mejor manera de asegurarse de que no es vulnerable a ataques o actividades maliciosas.
Por ese motivo, cdmon te ofrece bloqueo de dominio, privacidad WHOIS y DNSSEC entre otros de manera totalmente gratis al registrar tu dominio. ¡Registra ya tu dominio en cdmon y protégelo!